viernes, 28 de octubre de 2011

 Lo peor son las mañanas.
  Me despierto, busco su calor y, ¡bum! Él ya no está. Él ya no está conmigo. Las noches emborronan mi memoria, y me hacen pensar que mi vida comenzó cuando le conocí. Cada mañana, en cuanto abro los ojos, una realidad fría y dura me golpea el pecho y hace que me cueste respirar. A veces tengo tentaciones de suicidarme. No sería la opción correcta y yo no soy una cobarde, así que lo descarto rápidamente. Otras veces, mi cuerpo tiene más fuerza que mi cerebro y me dan ganas de golpear lo primero que se cruza en mi camino.
Pero, la mayoría de las veces, me quedo quieta en una esquina o junto a la ventana.
  Y lloro.
  Y tiemblo.
  Y los dientes me castañean, y me muero de frío a pesar de los 18ºC de septiembre. Entonces viene ella. Sabe que no me gusta que haga tanto por mí, pero ella viene y me tapa con una manta. No me dice nada; a veces me abraza o se queda a mi lado, pero nunca pronuncia una sola palabra.
  Tiene miedo de que cualquier cosa que me diga me recuerde a él y me ponga peor. Muchas tardes las paso sentada en un banco de la estación. Me siento, con una bufanda de lana tapándome la boca, la nariz y las orejas. La gente me suele mirar extrañada.
  Pero mi cuerpo es demasiado débil como para aguantar el frío, y los huesos se me entumecen a los minutos de salir al exterior. Las lágrimas se congelan antes de caer por mis mejillas y decido regresar a mi hogar.
  Y así todos los días. Cada despertar es una decepción. Y un golpe fuerte.
  Porque él ya no está. Él ya no está conmigo.

(Siento mucho no actualizar esto más a menudo, pero el frío ha congelado mi inspiración y desde hace tiempo sólo me salen palabras tan tristes como éstas.)

8 comentarios:

Cuando callas. dijo...

Es preciooooso! :O

Iria Cadilla Martínez dijo...

Mil gracias. :)

Anónimo dijo...

Te prometí que lo leería ;)
Es... GENIAL... Pero, ¿a qué se debe esa tristeza?
-Tu sonrisa es más bonita que cualquier otra cosa (:
Así que, ya sabes...

~SONRÍE~

Iria Cadilla Martínez dijo...

Infinitas gracias.(L) Tantos halagos son demasiados para mí.
Esa tristeza se debe a que ahora los días son en blanco y negro, porque él era quien daba color a mi vida, y ya no está conmigo.
¿Podrías decirme quién eres? Te estaría muy agradecida. Puedes enviarme un correo a rainlblueberry@gmail.com

Perfectísima imperfección dijo...

Me encanta *_*

Iria Cadilla Martínez dijo...

Gracias. :)

Anónimo dijo...

-Soy, pues... alguien.
No tiene mucha importancia. No sé si sé a quién te refieres con "él", pero me hago una ligera idea.

-Te mereces tantos halagos que no se podrían contar.
Cómo ya te he dicho, aunque parezca todo perdido, tu sonrisa es lo más bonito, así que agradecería que sonrrieras tan a menudo como puedieras, la vida son dos días, disfrútala enseñando tus maravillosos dientes.
Un beso, tu querida anónima (:

Iria Cadilla Martínez dijo...

Tus palabras han conseguido que sonriera. :) Muchísimas gracias por todo, en serio. No sabía quién eres, pero ahora sí: una persona maravillosa y adorable.
Muchas gracias, de verdad.
¡Un beso enorme!